Torres de vigía que te harán viajar en el tiempo
Esta vez te proponemos viajar en el tiempo. Nosotros ponemos el decorado. Qué te parece imaginarte un caballero teniendo que defender una fortaleza desde arriba de una torre de vigía? La Anoia es tierra de castillos fortalezas y torres. Será fácil ponerte en ambiente. Te recomendamos un circuito por cinco torres de vigía de la Anoia: la Torre de la Manresana a Prats de Rey, la Torre de Contraste en Argençola, la Torre del Castell de Òdena, la Torre de Castellfollit de Riubregós y la torre del Castell de Santa Maria de Miralles. Cinco joyas que esconden un montón de historias entre sus piedras milenarias y que te harán viajar en el tiempo.
La Torre de la Manresana – Prats de Rei
La primera de nuestras propuestas es la Manresana, en el municipio de los Prats de Rei. Es un edificio declarado bien cultural de interés nacional y su existencia aparece documentada desde el 1034, pero la construcción actual es del siglo XII, por lo cual se supone que debió de sustituir una edificación anterior más sencilla.
La terraza se encuentra en 21 metros de altura. Durante la Guerra de Sucesión en Cataluña fue escenario clave de los enfrentamientos entre austriacistes y borbons para controlar la zona de Calaf.
Se trata de una torre de vigía cilíndrica de origen románico y único elemento en buen estado que se conserva del antiguo castillo medieval de frontera. Su privilegiada ubicación permitía controlar visualmente una buena parte del paisaje de la zona y era clave en las funciones de vigilancia del territorio. Su altura y su enclave permiten disfrutar de una espléndida vista y de una espectacular panorámica de la comarca de la Anoia, con los campanarios de los Prats de rey, Calaf y las torres del Castell de Boixadors destacando en el horizonte.
Su visita es libre y tienes que tener en cuenta que la puerta de acceso se encuentra en 11 metros de altura y se accede por una escala exterior. Para mayor información puedes llamar a los teléfonos 93 869 84 62 o 93 868 03 66.
Torre de Contraste – Argençola
La segunda parada que te proponemos es la Torre de Contraste en Argençola que se encuentra adosada en la masía de Cal Cortés. Aparece documentada desde el 1241, cuando era el centro de una cuadra civil. La torre podría haber sido construida a principios del siglo XIII.
Consta de tres niveles separados por vueltas cupulares de piedra. Es de planta circular, con unos 7 m de diámetro y unos 20 m de altura. Internamente, consta de tres niveles separados por vueltas cupulares de piedra. La construcción fue propiedad de la abadía de Sant Pere dels Arquells, y en el siglo XIV pasó a ser una posesión del Monasterio de Montserrat.
Cómo es habitual, la puerta se encuentra al nivel intermedio. Es de medio punto y está rodeada de aspilleras. En el segundo piso hay una ventana abierta en época posterior. A pesar de su transformación funcional como depósito de agua, su estado de conservación es excelente gracias a la cuidadosa restauración llevada a cabo por su propietario, Joan Cortès.
Si vas a visitarla, aprovecha para ir también la iglesia románica de Santo Maur o Maure que está a la otra banda del camino. El primer documento que habla es del año 1443, a pesar de que con toda seguridad se trata de un edificio muy anterior, como lo constatan sus características arquitectónicas.
Su visita es exterior y libre y, si tienes suerte y cuando vayas hay su propietario en la masía, te abrirá y te explicará muchos detalles.
Torre del Castell de Òdena
La Torre del Castell de Òdena se encuentra en medio del municipio de Òdena. No tiene pérdida porque la verás a la parte más alta del núcleo antiguo del pueblo, muy cerca de la plaza del Ayuntamiento.
En la época medieval, el pueblo de Òdena quedaba cerrado totalmente por el recinto amurallado del castillo, incluyéndote la iglesia parroquial, hoy desaparecida. En la actualidad, el castillo forma parte de la trama urbana del pueblo, pero sobresale en un extremo más alto. Del antiguo castillo solo resta una pequeña parte de la muralla perimétrica. La torre es el elemento que se conserva y en buen estado.
Las primeras noticias del castillo se remontan en el siglo X, pero la construcción de la torre que hoy se conserva pertenece en los siglos XIII y XIV. Después de pertenecer a diferentes familias de la nobleza catalana, el castillo fue derrocado en 1463, y las obras de restauración de la única torre que quedó se iniciaron en 1985. Con tres pisos, esta torre está formada por un poliedro de once caras que forma una pirámide truncada, de la cual destaca la puerta adovelada.
Encontrarás una escala y una barandilla de hierro construida para acceder a la torre y poder contemplar las vistas desde arriba la torre.
Su visita es libre pero si lo deseas también puedes contratar una visita guiada a www.anoiapatrimoni.cat
La Torre de Ballester del castillo de Castellfollit de Riubregós
A la parte más norte de la comarca, llindant con el Solsonès y la Segarra, encontrarás el castillo de Castellfollit de Riubregós, una fortaleza a solo cinco minutos andando del municipio. Del recinto del castillo se conserva gran parte del perímetro amurallado, adaptado plenamente al terreno. A la parte más alta del castillo encontrarás su torre, de forma circular de 14,60 metros de altura y un diámetro de unos 8,5 centímetros, a partir de la cual se abre un gran patio interior.
Una vez allá, te recomendamos aprovechar para visitar la iglesia románica de Santa Maria del Priorat. La planta de la iglesia es de una sola nave, con planta de cruz latina que presenta a la cabecera un ábside central rectangular.
La Torre del Castell de Santa Maria de Miralles
El pequeño municipio de Santa Maria de Miralles acoge uno de los castillos más antiguos de la comarca de la Anoia. El año 960 ya es mencionado en un documento del conde de Barcelona Borrell señalándolo cómo una de las afrontacions del Castell de la Roqueta. Este castillo formaba parte de la línea defensiva que permitió la forestación de la comarca hacia poniente a finales del siglo X.
Desde mayo de 2018 se puede disfrutar de las magníficas vistas desde el mirador-escala de la torre de Levante del Castell de Miralles. Esta torre protegía el acceso en el castillo desde el camino. Por sus características parece andamio en época gótica, pero posiblemente podría estar edificada encima los restos de una torre anterior, teniendo en cuenta su situación estratégica en el control y defensa del castillo.
Puedes realizar una visita guiada de la mano de Anoia Patrimonio trimestralmente. Consulta el calendario de visitas en la web.